domingo, 15 de junio de 2008

La Bomba de Agua



Cuentan que un cierto hombre estaba perdido en el desierto, a punto de morir de sed.
Cuando él llegó a una casita vieja -una cabaña que se desmoronaba- sin ventanas, sin techo, golpeada por el tiempo.
El hombre deambuló por allí y encontró una pequeña sombra donde se acomodó, huyendo del calor del sol desértico.Mirando alrededor, vio una bomba a algunos metros de distancia, muy vieja y oxidada.
El se arrastró hasta allí, agarró la manija, y empezó a bombear sin parar.
Nada ocurrió. Desanimado, cayó postrado hacia atrás y notó que al lado de la bomba había una botella. La miró, la limpió, removiendo la suciedad y el polvo, y leyó el siguiente mensaje:
"Primero necesitas preparar la bomba con toda el agua de esta botella, mi amigo"PD.: "Haz el favor de llenar la botella otra vez antes de partir."El hombre arrancó la rosca de la botella y, de hecho, tenía agua.
¡La botella estaba casi llena de agua! De repente, él se vio en un dilema:
Si bebía el agua podría sobrevivir, pero si volcase el agua en la vieja bomba oxidada, quizá obtuviera agua fresca, bien fría, allí en el fondo del pozo, todo el agua que quisiera y podría llenar la botella para la próxima persona... pero quizá eso no salga bien.¿Qué debería hacer? ¿Volcar el agua en la vieja bomba y esperar el agua fresca y fría o beber el agua vieja y salvar su vida?¿Debería perder todo el agua que tenía en la esperanza de aquellas instrucciones poco confiables, escritas no se sabía cuando?Con temor, el hombre volcó todo el agua en la bomba. Enseguida, agarró la manija y empezó a bombear... y la bomba empezó a chillar. ¡Y nada ocurrió! Y la bomba chilló y chilló.
Entonces surgió un hilito de agua; después un pequeño flujo, ¡y finalmente el agua salió con abundancia! La bomba vieja y oxidada hizo salir mucha, pero mucha agua fresca y cristalina. Él llenó la botella ybebió de ella hasta hartarse. La llenó otra vez para el próximo que por allí podría pasar, la enroscó y agregó una pequeña nota al billete preso en ella: "¡Créeme, funciona! ¡Necesitas dar todo el agua antes de poder obtenerla otra vez!"




... para terminar yo agregaría esta pregunta:

¿Estamos dispuestos a darlo todo, aún cuando pareciera que dependemos de lo poco que nos queda, como le ocurrió al peregrino?... insisto ¿lo darías todo?... TODO

En mi familia... En mi trabajo... Con mi amigos... En mi día a día...

¿No será más bien que pensamos carecer de fuerza, cuando en realidad carecemos de disposición?


2 comentarios:

H.B.Master dijo...

jajajajajaj,
clasico de mis conversaciones, XD.
Pero bueno esta historia que cuentas no va ser la primera ni ultima en oir, de distintos modos y en distintos tiempos y religiones estan escritas, pero con el mismo fin.
A tu ultima pregunta yo soy capaz de dar todo por mis seres queridos y las presonas que me rodean, aunque no se note yo soy una persona de pocas palabras y hombre de palabra, aunque en algunos momentos me traiciona,
pero bueno te dejo cuidaos y seguid escribiendo ya que eso nomas nos quedara para la prosperidad...

Esteban Ponce dijo...

ai cosas en las que concordamos, las cuales son que somos capaces de darlo todo por alguien a quien queremos, aunque a veces no aparentemos eso, pero como dicen, las apariencias engañan, y a veces engañan demasiado de nuestra verdadera forma de ser...